Gracias Madre

Por: Iván Paz Nogueira

El segundo domingo de mayo no debía ser un día único, pues las madres se merecen cada día el regalo eterno del amor.

Ese ser prodigioso posee el don del saber, del entendimiento, la palabra precisa en el momento oportuno. Madre, gracias, por tus regaños.

Es imposible no envidiarte, no reconocer tu superioridad en todo, tú me inculcaste el amor, la confianza, la humildad, la sencillez, valores que hacen crecer y sentir que podemos llegar más allá.

Con tu sabiduría nadie en el mundo puede competir, pues para todo final siempre encuentras un nuevo principio.

Gracias, gracias, porque tu amor existe aunque estés ausente, cuando te vas ese vacío queda para siempre: eres insustituible, porque madre es más que todo.

Gracias por enseñarme que la felicidad no se almacena, se vive, se comparte porque hay que amarte demasiado para amarte lo suficiente.

Felicidades a todas las madres del mundo, especialmente a las madres cubanas que, a través de la historia, han sido ejemplo por su valentía y coraje y que ante situaciones difíciles han sabido crecerse y multiplicarse.

Felicidades hoy y siempre en este segundo domingo de mayo, en el cual muchos tendrán la dicha de abrazarte y otros conformarse solo con recordar la divinidad de tu dulzura.